Situada a 289 kms de Viena y a 73 kms de Salzburgo, Hallstatt se ubica en la región de Alta Austria a orillas del lago Hallstätter See.
En 1997, el paisaje cultural de
Hallstatt-Dachstein fue declarado Patrimonio
de la Humanidad por la Unesco conociéndose esta localidad como "la población más bella a orillas de un lago".
El acceso a Hallstatt está limitado al tráfico rodado, en las afueras existen dos aparcamientos siendo obligatorio la visita a pie. Merece la pena el paseo a pie por la localidad.
A la entrada se puede ver un monumento a los caídos en la Primera
Guerra Mundial.
Plaza principal (Markplatz): en esta pintoresca plaza destaca su fuente central y sus casas cuyas fachadas están cubiertas de enredaderas y flores.
Iglesia parroquial católica (Pfarrkirche): es una pequeña iglesia románica del siglo XII en la que destaca su impresionante torre que fue terminada hacia 1505. Durante las guerras religiosas la iglesia fue utilizada alternativamente por los católicos y los protestantes. Fue restaurada en 2002.
Osario Hallstätter Beinhaus: alberga una colección de unos 1200 cráneos expuestos en la capilla local curiosamente adornados con los nombres, profesiones y fechas de defunción de sus dueños inscritas en ellos.
El terreno en Hallstatt es tan escaso que hasta una época no muy lejana, a los diez años de la defunción de los vecinos se exhumaban los cuerpos del cementerio para dejar terreno libre para nuevos enterramientos siendo trasladados a un osario.
Mina de sal (Salzwelten Hallstatt). Se dice de ella que es la mina de sal más antigua del mundo con unos 7000 años de explotación. Se accede a la mina a través de un funicular.
Además de la mina, una vez que se sube hasta allí arriva hay que pararse en el mirador y contemplar las vistas. Las pruebas hablan por sí solas.
Existe un lugar peculiar en Hallstatt donde lo más curioso son unas losas del suelo. Se trata de unas calaveras con los ojos y las orejas muy abiertos y con una cremallera en la boca. El significado es que podemos ver y oir pero no se puede comentar nada de lo que sepamos.
Dónde comer.
Son muchas las opciones para comer pero estando
en un lugar tan privilegiado como Hallstat, lo recomendable es
elegir una terraza con vistas al lago en primera fila. ¿Qué mejor opción que
una trucha con una tarta de chocolate de postre?
Como curiosidad encontramos esta curiosa
foto en la puerta del baño. La explicación fue evidente al entrar. El baño era compartido y la separación entre los distintos cubículos no llega ni al suelo ni al techo con lo cual podía darse la situación de observar al vecino.